Vanguardia HD

¿Dónde está el gato?

DONA WISEMAN

Acabo de leer que los gatos escogen dormir donde hay altas cargas de energía contaminada, o sea negativa, o sea…¡dios mío! Uno de mis gatos duerme justo en mi almohada encima de mi cabeza. Mientras intento NO PONERME HISTÉRICA, ay, perdón… Trataré de descifrar, después de confesar que no leí todo el artículo. Si me pongo seria y muy honesta, claro que mi cabeza está repleta de energía contaminada. Tengo ideas locas, errores cognitivos, interpretaciones erróneas, idealizaciones, mentiras, creencias distorsionadas. Una colección amplia y variada de mie…perdón de nuevo, de basura. Y eso cuando siquiera hago el intento de pensar. Normalmente no lo hago mucho, me voy con el primer impulso que pasa por mis vísceras y…tampoco tiene mucho de sano ni atinado.

Entonces, ¿qué sucedería si permitiera que el gato (hablo de Bug, para aquellos que lo conocen) hiciera eso que dicen que hacen los gatos, trasmutar energía negativa. Sí, estoy en un espacio relativamente fantasiosa, pero que sirve un propósito. La pregunta real es, ¿qué pasaría si hago el trabajo de ir limpiando mi mente de, bueno, de eso? Ese trabajo implica cuestionarme. Cada vez que hago una declaración, que interpreto las acciones mías y de otros, que me justifico, que asevero una verdad que no he investigado, que me lanzo hacia adelante sin cuando menos un atisbo de un plan, que no pido consejos ni opiniones. Implica cuestionarme especialmente cuando mis pensamientos e ideas me detienen en la vida, cuando trabajan en mi contra. Ah…

Ahora, ¿dónde está ese gato?

Cada vez que hago una declaración [...] implica cuestionarme cuando mis ideas me detienen en la vida.

Dona Wiseman, terapeuta y actriz.

VMÁS

es-mx

2021-11-29T08:00:00.0000000Z

2021-11-29T08:00:00.0000000Z

https://vanguardia.pressreader.com/article/282608856089303

Vanguardia